Muchos conocíamos su uso en la Guerra de Afganistán de los chalecos antibalas 6B2 y 6B3, entre otros. Especialmente estos dos son los más abundantes de ver, sobre todo el “6B2”. Pero algunas fotos de la época se podía ver un chaleco muy parecido al 6B3, pero más pequeño. Pronto se desechó la idea que fuera una modificación personal. Lo que quedaba claro, era que se trataba de un nuevo chaleco antibalas, que reunía características similares al 6B2 y al 6B3. Pero se desconoce su nombre.
Afortunadamente, varios ejemplares de este chaleco han sobrevivido hasta nuestros días, permitiéndonos estudiarlo. En todos los ejemplares mostrados públicamente, aparece el típico marcaje de fabricación que comparten los otros chalecos soviéticos, pero desgraciadamente, no aparece el nombre de este modelo.
Algún coleccionista, examinando las denominaciones que le da el GRAU al material soviético, encontró lo siguiente:
6Б2 (6B2, la denominación del fabricante es Ж-81) 6Б2-3Т (6B2-3T, la denominación del fabricante es desconocida)
6Б3Т (6B3T, la denominación del fabricante es Ж-85Т)
Los 6B2 y 6B3 están identificados, pero ¿qué podría ser el 6B2-3T? El hecho de compartir elementos similares de los 6B2 y 6b3, hace pensar en que fuera un modelo intermedio entre ambos, ¿sería su nombre real el que aparece entre los dos conocidos en el listado, 6B2-3T?
Hasta que se desvele el misterio, se suelen aceptar estas denominaciones: «6B3 de transición» y «6B2-3T«.
Mis chalecos.
Recientemente he conseguido dos ejemplares de este extraño chaleco:
Vistas frontal y trasera de uno de ellos:
En el interior hay dos paneles para 12 placas de titanio cada uno. En la imagen de la izquierda vemos uno de ellos. En la de la derecha, se puede ver uno de los dos paneles acolchados que separa al panel de placas del cuerpo del usuario, para mayor comodidad. Las dos parejas de paneles están unidas y alojadas a su vez dentro de la «funda» verde olivácea, cerrada con velcro en los extremos inferiores de las zonas frontal y trasera:
Hasta ahora, todos los chalecos que he visto, están fechados todos en 1984. Los míos son de la talla 1. La larga costura superior horizontal encima del marcaje es realmente uno de los cierres de velcro, que si lo abrimos, encontramos alojado uno de los juegos de los paneles descritos antes:
En la parte posterior tiene 4 bolsillos inferiores de pequeño tamaño, con cierre de velcro. Introduciendo un cargador, vemos que no cabe entero, se especula en que fueran pensados para llevar cajas de cartón con munición. El bolsillo dorsal grande, posiblemente está diseñado para transportar una radio, aunque admite otros objetos:
Vista general para compararlo con el 6B2 y el 6B3 (concretamente un 6B3T-M-01). Los tres son de la talla 1:
6B2 y el chaleco «6B2-3T». Podemos ver que comparten todavía algunas carácterísticas, señaladas:
Pero parece que es más cercano en aspecto al 6B3. También comparten la característica de poder acceder a los paneles internos, despegando el velcro. Esto no se puede hacer con el 6B2, está cosido, habría que rasgar la funda exterior del chaleco para acceder a los paneles.
Su uso en Afganistán.
Contrariamente a lo que se podría pensar, hay cierta cantidad de fotografías en las que aparece en uso durante el conflicto afgano. Hasta su descubrimiento, había especulaciones sobre si sería un 6B3 modificado artesanalmente o puesto del revés. Pero queda claro que es un nuevo modelo de chaleco.
Previamente ya existía el chaleco antibalas 6B1, desarrollado por el Instituto Unificado de Materiales de Aviación (Всесоюзном Институте Авиационных Материалов, ВИАМ) en 1954 y aceptado para el servicio en 1957. Estaba compuesto por un mosaico de placas hexagonales de aleación de aluminio, junto a varias capas de nylon. Era capaz de parar disparos de 7,62 x 25 Tokarev disparados por subfusiles tipo PPSh o PPS a una distancia de 50 metros, así como metralla.
Se fabricaron menos de 1500 ejemplares, para ser almacenado, dejando aparcada su fabricación en masa solo en caso de necesidad. Por lo tanto, muy pocos podemos encontrar en fotografías, todas en el conflicto soviético en Afganistán.
Algunas de las escasas fotos del 6B1 en uso, tomadas en Afganistán:
Oficiales de la 1ª Compañía del 177º oo SpN (Grupo independendiente de Propósito Especial) en 1982. El de la derecha lleva cosidos dos bolsillos de forma casera en el 6B1:
Chaleco antibalas 6B2.
Aunque la experiencia del 6B1 era positiva, sus características de protección fueron consideradas insuficientes. En febrero de 1979, se celebró una reunión del Comité Central del Partido Comunista de la URSS (ЦК КПСС) para equipar a las unidades del futuro “contingente limitado de tropas soviéticas en Afganistán” que se desplegaría a finales de diciembre de ese mismo año. Estuvieron presentes varios representantes del Instituto de Investigación del Acero (NII Stali, НИИ Стали, Научно-Исследовательский Институт Стали), que propusieron la creación de un chaleco para el ejército en base a las soluciones constructivas desarrolladas previamente para el Ministerio del Interior, para el que NII Stali había creado en esa década los chalecos antibalas ZhZT-71 y ZhZL-74.
En primer lote experimental de chalecos 6B2 fue enviado a Afganistán en marzo de 1979. En 1981, fue adoptado oficialmente para su suministro a las Fuerzas Armadas de la Unión Soviética, recibiendo la codificación según el GRAU, de 6B2 (6Б2), siendo denominado por el fabricante como Zh-81 (Ж-81). Es posible encontrarlo con ambos nombres, pero es ampliamente conocido por el primero, 6B2.
Su composición protectora consistió en placas rectangulares de titanio ADU-605-80 de 1,25 mm de espesor y la pantalla de tela balística de aramida TSVM-DZh. Ofrece protección contra metralla y disparos de pistola. Sin embargo, no es efectivo contra armas largas, cartuchos de 7,62×39 consigue penetrar el chaleco a distancias entre 400 a 600 metros. Dependendiendo de la talla, el peso del chaleco va de los 4,2 a los 4,8 kilos.
Disposición de las placas de titanio en un 6B2 de la talla 2. A la izquierda la parte frontal y a la derecha la trasera):
Como curiosidad, el hecho de emplear tejido de nylon en su construcción y el empleo de “velcro” para los cierres en el 6B2, le daban un aspecto fuera de lo común para un elemento del equipamiento soviético de la época, originando rumores de que estos chalecos no eran de fabricación nacional, sino que fueran adquiridos en el extranjero, y no en un país socialista como la RDA o en Checoslovaquia, sino en algún país capitalista.
Mi chaleco 6B2.
Recientemente he adquirido un chaleco 6B2 de la talla 1. Como suele ser habitual, no contiene las placas protectoras. Tristemente, para ello, hay que descoser el chaleco y en muchas ocasiones nos encontramos que el chaleco ha sido rajado malamente. Dependiendo de la “herida”, y el remiendo que han acometido (podemos hallar parches de tela de diferente color o tejido) el aspecto puede ser más o menos pasable o que llegue a hacer daño a la vista. En mi caso, he tenido suerte.
Marcajes del chaleco. Afortunadamente se conservan visibles. Talla “1” y fabricado en 1984 (véase el “84”). Hasta ahora, he visto chalecos fechados en 1979 y entre 1981 y 1984.
En el interior, tiene escrito con tinta de bolígrafo «2 ПДР Жуков». Vendría a significar «2-й ПДР» (2ª Compañía Aerotransportada, Парашютно-Десантной Роты) y «Жуков» tiene todo el aspecto de ser el apellido «Zhukov»:
El chaleco 6B2 en Afganistán.
El 6B2 va a ser el chaleco principal que vamos a ver en el conflicto. Como ofrecía una protección insuficiente, sobre 1983-1984 se introducen los 6B3 y 6B4, pero con un peso de 12,2 y 12 kilos, respectivamente. Comparados con los 4,8 kilos del 6B2, podemos ver que la mejora de la protección supuso un excesivo aumento del peso para el combatiente soviético. En 1985 aparecerán las versiones más ligeras, 6B3-01 y 6B4-01. Pero ciertamente, en las fotografías, vemos los 6B3 y 6B4 en uso principalmente por soviéticos en puestos estáticos, de guardia, controles o montados encima de vehículos. Hay excepciones, por supuesto, pero sigue siendo más numeroso de ver el 6B2 en comparación a los otros.
Estos tres soldados llevan chalecos antibalas 6B2 y encima de ellos, unos portaequipos de combate artesanales:
En esta imagen, el primero de la fila lleva un chaleco artesanal con elementos de la mochila RD-54 encima del chaleco antibalas 6B2; el que le sigue lleva encima del 6B2 un chaleco portaequipo seguramente de origen paquistaní o afgano:
La superficie lisa del 6B2 invitaba a la costura para añadirle bolsillos, aumentando su utilidad. El de la foto de la izquierda tiene cosido un portaequipo 6Sh18 de uso para el fusil SVD. El de la izquierda de la foto de la derecha parece también que lo ha cosido a su chaleco 6B2:
Este soldado ha utilizado los velcros y correas del 6B2 para sujetar bengalas de señales: en las correas superiores lleva 2 NSP y en los velcros 2 RSP o ROP:
La falta de protección de blindaje en ciertos vehículos, como los camiones, hacía que se las ingeniaran colocando chalecos antibalas en zonas vitales:
Internet está lleno de fotografías donde vemos el 6B2, solo o con equipamiento encima que puede dificultar al principio su identificación. Pongo algunas, aunque sobran las explicaciones:
El chaleco 6B2 “post-Afganistán”.
El fin de la guerra en Afganistán no supuso por supuesto el fin del 6B2. Las crisis nacionalistas que sufrió la Unión Soviética, supuso bastante trasiego de tropas soviéticas y con ello, los chalecos que tuvieran de dotación. Y tras la disolución de la URSS, el 6B2 continuó en uso hasta que fuera totalmente reemplazado.
Los paracaidistas eran de las unidades que gozaban de mayor confianza por parte del gobierno soviético, hasta tal punto que eran independientes del resto de las Fuerzas Armadas. Su lealtad y eficacia, así como su entrenamiento y preparación, les hizo idóneas para ser empleadas como “policía” en todos los conflictos nacionalistas desde mediados de los años 80 hasta la desaparición del estado soviético.
Tropas paracaidistas enviadas en abril de 1989 a la capital Tbilisi (República Socialista Soviética de Georgia) para intentar restablecer el orden. Más información sobre los fatídicos sucesos aquí.
Paracaidistas llevan detenidos a dos manifestantes georgianos en Tbilisi, abril de 1989. Los 3 que van al frente llevan chalecos 6B2, mientras que el que podemos ver detrás, lleva un 6B3:
Aquí vemos paracaidistas frente a manifestantes lituanos en Vilna en 1990, portando chalecos 6B2:
Vehículos y soldados paracaidistas delante del edificio del Consejo Superior de la República Socialista Federativa Soviética de Rusia (RSFSR) durante el intento del golpe de estado de agosto de 1991. Al menos vemos a uno de ellos con un 6B2:
Paracaidistas rusos acordonando una zona del parlamento ruso durante la llamada “crisis constitucional” de octubre de 1993:
Más paracaidistas rusos, delante de la sitiada Casa Blanca rusa (el parlamento ruso), donde vemos también los efectos del incendio provocado por el bombardeo de la artillería durante la “crisis constitucional” de octubre de 1993:
Unos cadetes de una academia militar de artillería en 1995, posan casi todos portando el 6B2. Supongo que con la existencia de chalecos más efectivos en materia de protección, se relegaría al desfasado 6B2 para la instrucción:
Fuentes y más de información sobre los 6B1, 6B2 y más chalecos antibalas soviéticos en estos enlaces:
Portaequipos empleados por los soviéticos en la Guerra de Afganistán (y 5): réplicas e imitaciones en el mercado actual.
Actualmente, por desgracia, a mi modo de ver, como si no hubiera nada más en un ejército inmenso de 5 millones de miembros en aquella época (además de los Guardias de Fronteras o el ejército del Ministerio de Interior), lo que más atrae a la gente del ejército soviético en los años 80 es su participación en la Guerra de Afganistán. Esto lo saben muy bien los vendedores sin escrúpulos, que intentan dar salida y colar muchos artículos como “auténticos de uso” en la Guerra de Afganistán (otra lacra son los artículos a la venta que incluyen el término muy recurrente de “Spetsnaz”), porque lo demás «no vende» tan bien.
Algunas cosas por razones obvias sí nos valen, pero otras son adaptaciones de material que se hizo con otras funciones y no se usó realmente en lo que dice el estafador y en otras ocasiones, son réplicas o hasta incluso burdas imitaciones. Vamos a ver las principales réplicas e imitaciones de los portaequipos de combate, algo que me parecía muy interesante para completar y cerrar el tema.
Los “Chicom”.
Anteriormente pudimos ver unos cuantos modelos del portaequipo fabricado en China y conocido como “Chicom”. En Afganistán, solo podemos encontrar en uso los modelos Tipo 56 para la carabina SKS y ampliamente el modelo para fusil, con 3 bolsillos principales y 4 más pequeños. El modelo Tipo 81 de 4 bolsillos principales y 2 bolsillos pequeños, parece que no fue suministrado a los muyahidines. Podemos ver modelos parecidos de 4 bolsillos, pero suelen tener sistema de cierre diferente, mayormente de corchetes y no son de fabricación china, sino paquistaní y de otros países. En todo caso, se nota la diferencia entre estos chalecos de 4 celdas y el modelo chino. Para más información, mirar la entrada sobre los «Chicom».
Existe una réplica actual del “Chicom” de tres celdas. Supongo que al venir del mismo país de origen del original, no tuvieron problemas en replicarlo, porque son idénticos a groso modo. Pero ojo, que no son iguales. El tono no es suficiente para diferenciarlos, dada la gran mayoría de tonalidades que presenta el original, aunque en la réplica suelen tener siempre el mismo: un tono verdoso claro.
El material sin embargo cambia, siendo aparentemente más resistente en la réplica, dificultando la posibilidad de realizar la manualidad de dar de sí los bolsillos principales para que quepan 2 cargadores por bolsillo en lugar de 1. La gente que lo ha intentado, ha terminado descosiendo los bolsillos, dañando el chaleco.
La réplica jamás tiene marcajes de fábrica en la parte posterior, a veces tiene cosida una pequeña etiqueta blanca comercial actual.
Ejemplo de marcaje de un «Chicom» original:
Las anillas para las correas tienen la forma de una “D” plateada, mientras que en la réplica son rectagulares y de color verde.
Los “Lifchik”.
Aquí hay mucha variedad. Lo más habitual es que intenten colar el “Lifchik” modelo 1988 como de uso en el conflicto. Es una afirmación totalmente falsa, aunque es soviético, no se llega a distribuir hasta el verano de 1989, después de la retirada soviética. Aquí se puede repasar los modelos empleados, el resto hay que desecharlo. De éstos existen algunas réplicas, aunque son muy escasas y suelen tener precios nada baratos.
Conjunto de “Lifchik” modelo 1988 compuesto por portacargadores y cinturón portagranadas. Como ya he comentado, no se usó en Afganistán:
Para complicarlo más, el mercado está inundado de réplicas del “Lifchik” modelo 1988. Algunas están mejor logradas que otras. Y para colmo, hay réplicas totalmente fantasiosas e irreales, empleando telas y camuflajes que no tienen nada que ver con la realidad. Pongo bastantes fotografías, para que se vea la amplia “colección” de falsificaciones disponible en el mercado, muchas de ellas procedentes de vendedores ucranianos.
Una réplica lograda. Suelen tener las lenguetas de cierre de cuero de color negro en vez de marrón oscuro.
Colección de réplicas mediocres, ávidas de nuestro dinero…
Yo aconsejo mirar y volver a mirar las fotografías reales, si alguna cosa que venden no nos cuadra, es muy posible que sea falsa.
Y con esta última quinta entrada, damos por finalizado el tema de “Portaequipos empleados por los soviéticos en la Guerra de Afganistán”. Espero que haya sido de utilidad.
Portaequipos empleados por los soviéticos en la guerra de Afganistán (4): El “Lifchik” soviético.
Tal fue el éxito del “Chicom” en manos de los soviéticos, que la URSS lo copió y modificó para cubrir las necesidades de los combatientes, creando sus propios portaequipos de combate, que serían conocidos informalmente como Lifchik (лифчик, sujetador).
La fecha de introducción de los primeros parece ser por el año 1985. Según una fuente (y de momento, es la que más me convence), existen 4 modelos de “lifchik”, aunque solo 3 fueron utilizados en Afganistán. El encontrar alguna foto real de ellos, refuerza esta teoría. Los 3 primeros modelos, por su diseño, los podríamos englobar en el término “lifchik 1º modelo”, de hecho hasta ahora se vienen así denominando por los apasionados del tema, para diferenciarlos del cuarto y último modelo. Éste evidentemente viene a ser el “lifchik 2º modelo”, varía en su diseño con respecto a los anteriores y a pesar de que aparece en 1988, no se llega a distribuir a las tropas soviéticas en Afganistán.
La disposición genérica de los “lifchik” es la siguiente:
– 3 bolsillos principales para 6 cargadores (2 por bolsillo).
– 4 bolsillos para 4 granadas de mano (F1, RGD-5…).
– Unas cintas cosidas para llevar 2 bengalas.
Todos los “Lifchik 1º modelo” cuentan con el mismo diseño, solo varían en el sistema de cierre de los bolsillos. Independientemente al sistema de cierre, todos presentan además zonas con velcro.
“Lifchik” 1985.
Este primer modelo cuenta con un sistema de cierre de broches en los bolsillos parecido al estadounidense “lift-the-dot” de principios del siglo XX. Esta foto es muy interesante, es del 18 de febrero de 1988, durante una inspección de material capturado a los insurgentes afganos. En el centro de la foto podemos ver este modelo de “Lifchik”:
Cierres similares (parece que no son iguales al del «Lifchik») a este tipo también los empleaban los soviéticos en otros elementos, como la cartera portamapas para oficiales, las bolsas de las máscaras antigás PMK y PBF o en chalecos de piloto de helicóptero y bolsillos sanitarios:
En esta fotografía, están señalados con una estrella roja los “modelos 1985”; el del punto rojo es un “Lifchik” pero no termino de ver si es un modelo de 1985 o 1987. Vemos que en todos los “Lifchik” llevan bengalas de señales. El punto azul señala un portador de un “Chicom” Tipo 56 y con punto verde, un cinturón para granadas VOG, cuyo modelo exacto no se puede determinar:
Otra foto muy interesante. Señalado con una estrella roja un “modelo 1985”; con puntos rojos, varios “Lifchik” pero no termino de ver son modelos de 1985 o 1987. Señalados con un punto verde, dos portaequipos artesanales hechos con bolsillos de la mochila RD-54 y señalado con un punto azul, otro portaequipo artesanal hecho con un portacargador de SVD. Varios de estos portaequipos artesanales les han añadido tiras para sujetar bengalas de señales:
Para los “Lifchik” se desarrolló el correspondiente modelo de cinturón portagranadas para las VOG de 40 mm del lanzagranadas GP-25:
“Lifchik” 1986.
Este segundo modelo cuenta con un sistema de cierre de corchetes, el resto es exactamente igual que el anterior modelo de 1985:
Un “Lifchik” que podría ser el modelo de 1986. El soldado de la izquierda lleva otro “Lifchik”. El que los bolsillos laterales parezcan que no tienen la cabeza del corchete visible, invita a pensar que pudieran ser modelos 1985 o 1987, que se les hubiera desgastado la tela y por eso fuera visible parte del corchete escondido en la solapa del bolsillo:
“Lifchik” 1987.
El tercer último modelo tiene el mismo sistema de cierre de corchetes que el anterior, pero los tiene protegidos, ocultos por la tela de la solapa de los bolsillos.
Con las solapas cerradas, no es fácil diferenciar al modelo 1987 del modelo 1985. Esta fotografía del 18 de febrero de 1988 (más arriba hemos visto otra en el mismo escenario), donde vemos cómo le muestran a un oficial los misiles Stinger capturados a los rebeldes afganos. El soldado con jersey soviético y ceñidor occidental, lleva un “Lifchik” que podría ser este modelo:
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“Lifchik” 1988.
Como dije al principio, el “Lifchik” de 1988 (o a veces llamado “2º modelo de Lifchik”, aunque como vemos, sería más bien el “4º modelo”) jamás fue empleado en Afganistán. Por desgracia es algo muy recurrente por los estafadores que quieren sacar dinero a costa del desconocimiento y por supuesto, lo que venden son réplicas, algunas bastante lamentables. Sobre este modelo, hay una entrada exclusiva para él, para evitar confusiones.
Con los “Lifchik” soviéticos, se cerraría el capítulo de los portaequipos de combate empleados por los soviéticos en Afganistán. Pero he querido añadir una quinta entrega, relativa a las réplicas y estafas que hay sobre estos portaequipos. Hasta la próxima entrega.
Portaequipos empleados por los soviéticos en la guerra de Afganistán (3): el chaleco BVD y su posible antecesor. El KBSN en Afganistán.
En esta tercera parte, vamos a ver 3 chalecos soviéticos, ciertamente exóticos, hasta el punto de poder ser confundidos con portaequipos artesanales usados en el conflicto afgano-soviético.
El chaleco BVD.
El chalco BVD (БВД, Боевая Выкладка Десантника, equipo de combate paracaidista). Desconozco la entrada en servicio de este chaleco, pero al menos hay chalecos datados de 1984. Su intención era combinar las características de una mochila y las cartucheras portacargadores. Orientado para su uso por los paracaidistas (VDV), también lo utilizaron los Guardias de Fronteras (PV) y según una fuente, también lo llegaron a probar algunas unidades de Infantería Motorizada.
Tuviera éxito o no el BVD, lo podríamos considerar de los primeros, sino el primero, de los chalecos portaequipos de combate soviéticos, y su uso se llega a ver al menos hasta el 2001, siendo visto también en la primera guerra de Chechenia. Como esta entrada versa entorno el conflicto afgano-soviético, el BVD será objeto de otra entrada más extensa más adelante.
El BVD en Afganistán.
Se pueden ver fotografías de su uso tal como viene de fábrica, así como también sufrió modificaciones artesanales de sus propietarios.
Guardias de Fronteras del antiguo KGB en Afganistán:
Tropas del VDV. En esta foto podemos ver que llevan el BVD, en la fila que está de pie los 2 de la izquierda (llevan una cantimplora en el bolsillo grande del pecho) y el último de la derecha. El primero de la izquierda de los que están agachados también:
Aquí otro BVD, lleva documentación en el bolsillo grande del pecho. El de la derecha lleva un “Chicom” Tipo 56 con unos prismáticos y varias bengalas NSP:
Tres oficiales con BVD:
Más BVD en Afganistán:
El de en medio lleva el BVD y el de la izquierda un “Chicom”:
Señalados en rojo, vemos a tres portadores de chaleco BVD. En verde, dos portaequipos artesanales confeccionados con bolsillos de la mochila RD-54 y en azul, un portaequipo que parece totalmente artesanal:
El que está detrás del que está posando con el lanzador de misil antiaéreo Stinger, lleva un BVD, pero si os fijáis, está modificado de forma casera, no lleva los 3 bolsillos de la parte superior del pecho (y otro tanto habrá hecho con la parte trasera):
Una curiosa modificación, le ha quitado los bolsillos superiores y ha cosido otros para llevar bengalas adicionales:
El soldado que está mirando la pareja de tortugas que tiene su compañero lleva otro BVD modificado. Parece que la tendencia es de hacerlos más pequeños, a modo “Chicom”:
¿El chaleco antecesor del BVD?
Otro chaleco soviético, posiblemente anterior al BVD. Algún ejemplar se ha visto, datado en 1983. Se especula si podría ser el antecesor del BVD, debido al rudimentario y simple sistema de cierre de los compartimentos. Para abreviar, lo voy a llamar “Pre-BVD” a falta de su denominación real.
Comparativa del BVD y el “Pre-BVD”:
Fotos en Afganistán:
El de la izquierda lleva un “Chicom” Tipo 56, mientras que a la derecha del todo vemos señalado al portador del chaleco “Pre-BVD”:
Tanto el BVD como este “Pre-BVD” (por así llamarlo) coexistirán en Afganistán:
El chaleco KBSN en Afganistán.
El más raro y escaso de ver, mayormente por ser de uso exclusivo por parte de los miembros de la unidad especial “Vympel” del KGB. Solo me voy a limitar a poner fotografías de este chaleco en Afganistán, el resto de información que he podido recopilar de este chaleco se puede encontrar en esta otra entrada.
Portaequipos empleados por los soviéticos en la Guerra de Afganistán (2): El “Chicom” chino y otros productos locales.
El “Chicom”.
El Chicom (término popular mundialmente extendido, que viene teóricamente de contraer Chinese Comunist, aunque es un término que podría aplicarse a bastantes más cosas) es diseñado por China a mediados de los años 50. En realidad, ese no es su nombre, pero es empleado para llamar a los diferentes modelos de origen chino u otros de similares en su diseño, fabricados por otros países.
El primero y más conocido, el más típico, es el modelo Tipo 56. Se diseñó para ser utilizado con los cargadores de 7,62 x 39 mm de los fusiles Tipo 56 y Tipo 56-1 (versiones chinas de los AK-47 y AK-47S respectivamente). El color varía en distintas tonalidades, pudiendo encontrarlo desde el verde oscuro o pálido hasta el marrón o el beige:
Esta es la disposición de este portaequipo:
– 3 bolsillos para 3 cargadores de 7,62 x 39 mm (1 por bolsillo). Los soviéticos los modificarían artesanalmente para que les cupieran 6 cargadores, operación más asequible cuando se trata de meter los cargadores de 5,45 x 39 mm del AK-74, en lugar que los originales.
– 2 bolsillos para cajas de munición de 7,62 x 39 mm (También se pueden meter granadas de mano).
– 1 bolsillo para llevar los útiles de limpieza y mantenimiento del arma. Es un poco más grande (en altura), está en el extremo derecho (visto una vez puesto).
– 1 bolsillo para llevar un bote con aceite para limpiar y lubricar el arma. Está en el extremo izquierdo. Por dentro tiene una capa engomada, para protegerlo de los restos de aceite que tuviera el bote. Como este bolsillo es de otro material, se dan casos en los que viene de fábrica en una tonalidad distinta a la del resto del “Chicom”:
En estos últimos cuatro bolsillos también se pueden meter granadas de mano, como ya habéis visto. A gusto del usuario.
Entre otros modelos que reciben la denominación de “Chicom”, además del Tipo 56 que hemos visto, hay también:
– El Tipo 56 para la carabina SKS. Tiene de 9 a 10 bolsillos para llevar peines de 10 cartuchos.
– El Tipo 63, parecido al anterior, pero con bolsillos más grandes, para meter cargadores del fusil Tipo 63. He visto de 7 y de 9 bolsillos.
– El Tipo 81. Como el Tipo 56, pero sin 2 de los bolsillos pequeños y con 4 bolsillos grandes en vez de 3. Fabricado para el fusil chino Tipo 81.
Lo más normal es que al buscar información, encontréis escrito Type 56 o Type 81 en lugar de Tipo 56 y Tipo 81. Es lo que tiene el inglés, que es el idioma predominante.
En la época de la invasión soviética de Afganistán (25/12/1979 al 15/02/89), seguían enfrentados la URSS y China, por lo que el conflicto era una posibilidad para que los chinos entregaran armas a los enemigos de los soviéticos, los insurgentes afganos (llamados “muyahidines”). Debido a que el material chino era en gran parte (por no decir el 99%) copia del soviético, era de gran aceptación por parte de los muyahidines, que lo preferían a otro material europeo o estadounidense, aunque fuera más moderno. Además, era compatible con el material capturado al ejército regular del gobierno comunista afgano. Así llegarían, entre otros suministros, los “Chicom” en diferentes versiones (más abundantes los Tipo-56) a manos de los rebeldes afganos. Quiero suponer que, Pakistán, aliado de China y enemigo también de la URSS (a su vez aliada de la India, enemigo acérrimo de Pakistán, con varias confrontaciones bélicas serias, en las que ha sido derrotado siempre Pakistán), fabricaría, además de armas y municiones, “Chicom” autóctonos para los insurgentes afganos.
Su extremada sencillez y efectividad, ha hecho que sea utilizado en numerosos conflictos a lo largo de la historia, fabricándose en otros países (Pakistán, Irak…), los cuales, también les han añadido modificaciones locales.
Algunos ejemplos. Solo un par de fotos de su uso por ambos bandos, en la guerra de Vietnam:
“Chicom” paquistaníes, en diferentes variantes autóctonas:
Un “Chicom” de cuatro celdas fabricado en Irak. En el botón del corchete tiene una estrella grabada:
Todavía puede verse en algunos conflictos (como el reciente de Libia en 2011, el chaval lleva un AK-103):
O empleado por ambos bandos en la última Guerra en Afganistán:
Afganos…:
…estadounidenses:
O por ejemplo, el “Chicom” en el ejército nigeriano (322º Regimiento paracaidista, 2007). El último de la derecha es de 4 bolsillos grandes (Tipo 81):
El “Chicom” en uso por los soviéticos.
Los combatientes soviéticos descubrieron que el “Chicom” que llevaba el enemigo era más adecuado que el equipo que llevaban, y comenzaron a utilizar todos los que caían en sus manos. Como 3 cargadores se quedaban cortos, en ocasiones los modificaron para que le cupieran 6 cargadores. También servía para complementar las capacidades de la RD-54, y se podía ver perfectamente soldados ataviados con la mochila y el “Chicom”.
Usaron no sólo el Tipo 56, sino también otros modelos, como el de 4 bolsillos grandes (parecidos al Tipo 81, pero más bien son otros de fabricación paquistaní/afgana que tienen distinto sistema de cierre que los chinos) y también alguno para SKS reutilizado para llevar las granadas VOG de 40 mm.
Varias fotos del Tipo 56 (el que tiene 3 bolsillos). Es solo una pequeña muestra en las que aparece, hay muchas más, pero no es cuestión de saturar más de lo necesario. Como ya se ha dicho, el mismo diseño presenta variaciones de color:
Soviéticos de alguna unidad de especial propósito («spetsnaz») vestidos con indumentaria afgana:
El Tipo 56 para SKS utilizado para portar granadas VOG:
“Chicom” no chinos y portaequipos artesanales afganos
Además de los “Chicom” de origen chino, se encuentran otros que los diferenciamos en especial por el sistema de cierre, totalmente diferente. Por otra parte, he incluido en esta “categoría” otros modelos diferentes, fundamentalmente hechos en cuero. Pongo unas fotos (que valen más que mil palabras) de varias fuentes, mayormente de Red-alliance, que ilustra también la existencia y uso de «Chicom» fabricados localmente.
Algunas fotos de “Chicom” de 4 bolsillos portacargadores. Parece que no son tan abundantes en Afganistán como el de 3 bolsillos. No parece que el «Chicom» Tipo 81 fuera suministrado en Afganistán, no aparece en ninguna fotografía que haya visto. El sistema de cierre, no es como el chino, ¿podría ser de fabricación paquistaní o puede que sean de fabricación afgana?:
Este de 3 bolsillos grandes, posiblemente sea de origen paquistaní:
Un oficial soviético con dos soldados del ejército afgano con portaequipos de origen no chino (¿afgano, paquistaní?):
Exóticos y llamativos…
El soldado de la izquierda lleva un chaleco tipo “Chicom” pero de fabricación artesanal, seguramente de origen afgano. A la derecha vemos un “modelo básico” de portaequipo artesanal con elementos soviéticos (2 portacargadores de AK y 2 portagranadas de la mochila RD-54):
Fijaros en la creación en cuero del de la derecha. También los otros dos llevan unos portaequipos caseros.
Esta fotografía es muy interesante en detalles. Véase la estrella del casco que parece pintada en verde para ocultarla. La mochila de montaña. Las radios son: en primer plano una R-159 y al fondo una R-107M. Y el AKS-74 lleva un cargador de color “plum”/ciruela:
Más ejemplos de estos últimos correajes de cuero afganos en la actualidad:
Algunas de las fotos de esta entrada las he sacado de este post sobre chalecos en Afganistán de Red Alliance.
Este fue mi primer artículo importante que hice en un foro. No deja de ser una recopilación de información que se puede encontrar por otros sitios. Pero me resulta interesante unirla. En esta ocasión, lo he revisado, ampliando y modificando cosas. Es una serie de 5 entradas, relativas a los portaequipos que emplearon los soviéticos en Afganistán:
– Portaequipos artesanales soviéticos.
– El “Chicom” chino y otros productos locales.
– El chalceo BVD y su posible precursor. El KBSN en Afganistán.
– El “Lifchik” soviético.
– Réplicas e imitaciones en el mercado actual.
Portaequipos empleados por los soviéticos en la guerra de Afganistán (1): Portaequipos artesanales soviéticos.
Desde la Segunda Guerra Mundial, la URSS no se había vuelto a encontrar en una situación bélica tan grave. Las intervenciones armadas soviéticas en Hungría (1956) o en Checoslovaquia (1968), para nada eran comparables con Afganistán. Así que no había grandes innovaciones en décadas sobre el tema del equipamiento en masa del vasto ejército soviético. La infantería soviética solía disponer básicamente de un portacargador con una capacidad de 3 o 4 cargadores (realmente el de 4 celdas, una celda es para alojar clips con munición extra) que se colocaba en el ceñidor a un lado de la cadera y en el otro extremo un pequeño portagranadas para 2 granadas de mano. Cuando llegaron a entrar en combate, vieron que no era tan práctico.
Por otro lado, el VDV disponía del sistema RD-54, con su mochila, funda de pala, portagranadas y portacargador para 2 cargadores. La guerra demostraría que era necesario poder llevar más cargadores encima, y a mano. También existía el chaleco BVD, el que cabían 6 cargadores, pero parece que no resultó tan práctico, sufriendo modificaciones algunos de ellos por sus propietarios. Además del BVD, había otro chaleco, del cual no sabría decir si era antecesor del BVD, pero sí compartieron escenario. Ya los veremos más adelante en fotos reales del conflicto afgano.
(Foto de la galería del forero de Red Alliance «Koalorka«)
Ya tenemos el equipo soviético con el que comenzaron en el conflicto. Faltaría añadir el portacargador para SVD, el portagranadas o el chaleco salvavidas. Ahora los veremos. La experiencia hizo que todo este equipo fuera modificado por sus propietarios para crear portaequipos que cubrieran las necesidades del combatiente, apareciendo modelos personalizados de todo tipo. Por otro lado, también se dotaron con material capturado al enemigo rebelde (como los “Chicom”), y conforme se desarrollaba la guerra, se creó y mejoró los “Chicom” en los llamados “lifchik”. Entre otros elementos para la fabricación “casera” o “artesanal”, los soviéticos utilizaban básicamente éstos:
Son abundantes y diversas las nuevas creaciones, no existe una norma, pongo unos ejemplos muy representativos, porque fotos de esto, hay muchas y no es cuestión extenderse. Teniendo claro los elementos que empleaban, podremos reconocerlos.
Unos consisten en unir 2 portacargadores de 4 cargadores y utilizar 2 correas de AK como tirantes:
El de la izquierda lleva un Chicom, pero el de la derecha se ha configurado un par de portacargadores de AK y algún bolsillo más:
Otro «modelo» muy común, es unir 2 portacargadores de AK y 2 portagranadas, todos ellos obtenidos de 2 mochilas RD-54. Hay casos en los que han unido 3 portacargadores o les han añadido algún pequeño bolsillo para llevar alguna bengala:
A la derecha vemos otro “modelo básico” con 2 portacargadores de AK y 2 portagranadas de la RD-54. El soldado de la izquierda lleva un chaleco tipo “Chicom” pero de fabricación artesanal, posiblemente de origen afgano:
En esta imagen, el primero de la fila lleva un chaleco artesanal con elementos de la RD-54, encima de un chaleco antibalas 6B2; el segundo lleva encima de un 6B2 un chaleco seguramente de origen paquistaní o afgano; el tercero y último lleva un «Chicom»:
Arriba, el de la izquierda lleva otro chaleco artesanal con elementos de la RD-54 y el de la derecha un «Chicom». En la foto de abajo, señalado en un recuadro rojo, otro portaequipo artesanal con partes de la RD-54:
Aquí todos llevan «Chicom», excepto el último de la derecha, con otro chaleco con partes de la RD-54, entre los bolsillos ha añadido unas tiras para sujetar una bengala de señales:
“Chalecos” creados con el portacargadores (el 6Sh18) del SVD. Fijarse en el último de la derecha, los 2 de la izquierda llevan “Chicom” modificados para llevar 6 cargadores, 2 en cada bolsillo principal.
El de la foto de la izquierda lo tiene cosido a un chaleco antibalas 6B2. El de la izquierda de la foto de la derecha parece también que lo ha cosido en un chaleco antibalas 6B2 (chaleco antibalas bastante común en esta guerra):
Entre dos hombres con «Chicom», el tirador con SVD lleva su propio chaleco artesanal, girado y con unos enganches para alojar bengalas de señalización y lo que parece o un cuchillo o bayoneta:
Aquí vemos varios “modelos” diferentes juntos. Señalados con una raya azul, llevan uno fabricado con al menos 2 bolsillos de AK de la mochila RD-54, señalado en rojo con un portacargador de SVD al pecho y el señalado en verde, no consigo ver exactamente lo que ha empleado para fabricarlo:
Otros chalecos portaequipo se fabricaron tomando como base los chalecos salvavidas (СЖТ, Спасательный жилет) que usaban los ingenieros o carristas soviéticos, que tienen muchos bolsillos para alojar las “bolsas” que permiten que flote. Éstas eran retiradas y ya estaba listo para meter cargadores o lo que hiciera falta:
Para coger los cargadores sin abrir la chaqueta, solían también hacerles cortes para poder sacar los cargadores desde fuera:
Foto interesante. El de la izquierda del todo no termino de verle bien, algún pouch portagranadas lleva (el del ceñidor). En medio, el soviético que está junto al afgano, se le ven al menos 3 portacargadores de RD-54 cosidos a una chaqueta a la que le ha arrancado las mangas, por lo tanto hablamos de un chaleco. Y el que está a la derecha con ushanka en la cabeza y con las manos en los bolsillos, riéndose, lleva un chaleco y se le nota que tiene cargadores metidos dentro:
Otras fotos. Curioso, un chaleco con camuflaje a la izquierda:
El de la derecha del todo lleva un chaleco salvavidas modificado para tenerlos a mano por fuera. El de enmedio tiene un chaleco que no sé si es una modificación casera con materiales a mano o es artesanal afgano:
Y para acabar, chalecos artesanales, que no parecen exóticos afganos. Desconozco la procedencia, pero no he podido encuadrarlos en algún tipo más o menos definido como los anteriores. Los de estas dos fotos son muy interesantes. Varios de ellos se dan un aire al chaleco de ingenieros, no sé de dónde lo habrán sacado:
Los tres los llevan encima de chalecos antibalas 6B2.
El de enmedio que nos ofrece su espalda, lleva un chaleco artesanal curioso donde se han colocado un portagranadas, 2 bengalas y una pequeña petaquilla que parece que podría estar relacionada con el mundo de las transmisiones, entre otras cosas.
El de la izquierda lleva diferentes bolsillos llenos de cosas. El de la derecha, no es un “Chicom” podría ser de otra procedencia, aunque se le da un aire a un “Lifchik” al que le han practicado modificaciones.
Otra modificación. Es un miembro del Grupo A (Alfa) de la KGB perteneciente a algún destacamento especial en misión en Afganistán. Aparte del inconfundible casco TIG PSH-77, lleva un chaleco totalmente artesanal. Parece una chaqueta por los botones (¿un chaleco salvavidas altamente modificado?) a la que se le han añadido diferentes bolsillos y arrancado las mangas. Hasta parece que ha cosido dos bolsillos adicionales en la parte inferior, uno claramente es un sencillo bolsillo portagranadas:
Hay más pero son más raros de ver, parecen totalmente artesanales. He leído de que también utilizaron chaquetas de los uniformes de combate M-69, a lo mejor son la base para algunas creaciones bastante variopintas, no los he visto claramente, supongo que debido a tanta modificación, tengo que repasar fotografías. Creo que aquí se ha mostrado una buena colección de las principales «rarezas» que nos podemos encontrar. También hay fotos en Internet de gente que se ha animado a «destrozar» mochilas y correas para fabricarse los suyos, basándose en los tipos que aparecen en estas fotografías. Otros se los han hecho cosiendo casi desde cero con mayor o menor fortuna.
Tal día como hoy, hace 25 años, el 15 de febrero de 1989, el 40º Ejército Soviético oficialmente abandonaba Afganistán, tras una cruenta guerra que había durado 9 años, 1 mes y 3 semanas.
Una larga columna de vehículos sovíeticos recorren por última vez los 816 metros del (paradójicamente) llamado «Puente de la Amistad», que cruza sobre el río Amu Daria y que une a la ciudad de Termez (de la por entonces República Socialista Soviética de Uzbekistán) con Afganistán (concretamente la ciudad de Hairatan, provincia de Balkh).
Como gesto simbólico, el por entonces, Teniente General Boris Gromov, Comandante del 40º Ejército Soviético, atraviesa la frontera a pie, como «último soldado soviético» en abandonar Afganistán. Lo pongo entre comillas porque no fue el último realmente, al final lo explico. Exactamente no lo hizo solo: su hijo de 11 años, Maxim, va a su encuentro y juntos cruzan a pie la frontera.
Los acuerdos de Ginebra (14 de abril de 1988)
Ya desde 1982 se venían produciendo negociaciones con carácter informal para acabar con el conflicto, pero sin resultados. La retirada soviética se gestó en los Acuerdos de Ginebra, firmados el 14 de abril de 1988, entre Afganistan y Pakistan, con la presencia de Estados Unidos y de la Unión Soviética en el papel de garantes. Se acordaban los principios de relaciones mutuas entre Pakistán y Afganistán, en particular, sobre la no injerencia y la no intervención. También ambos países acordaron el regreso voluntario de los refugiados afganos y el arreglo entre ambos de la situación relativa a Afganistán. Todo esto con el testimonio de la Unión Soviética y los Estados Unidos, que firmaron una declaración dando garantía de carácter internacional de lo firmado por sus respectivos aliados, así como a no intervenir ni interferir. Como los «muyahidines» (la guerrilla afgana) no fueron invitados ni a las negociaciones ni a la firma de los acuerdos, rechazaron su validez.
Los acuerdos contenían la previsión del calendario de la retirada de las tropas soviéticas de Afganistán. Oficialmente comenzaba el 15 de mayo de 1988 y acababa el 15 de febrero de 1989.
La cifra total de personal soviético afectado por la retirada estaba reducida de 124000 a unos 100300 hombres, al no contabilizar a los consejeros militares soviéticos para el Ministerio de Defensa afgano, al personal del Ministerio de Interior soviético, al de la KGB (que incluye a a los Guardias de Fronteras) y a los contratistas civiles soviéticos.
Para comprobar el cumplimiento de los acuerdos y la retirada soviética, las Naciones Unides establecieron por la Resolución 622 en mayo de 1988 la Misión de Buenos Oficios en Afganistán y Pakistán» (United Nations Good Offices Mission in Afghanistan and Pakistan, UNGOMAP).
El Teniente General Boris Gromov
Boris Vsevolodovich Gromov fue el general encargado para llevar a cabo la retirada. Era la tercera vez que servía en Afganistán y en esta ocasión, el 1 de junio de 1987 se le entregó el mando del 40º Ejército Soviético, que englobaba a todas las fuerzas armadas destacadas en el país (excepto unidades como los Guardias de Fronteras de la KGB o los grupos de «especial propósito» también de la KGB o unidades del Ministerio de Interior y los contratistas civiles). Ya contaba con buenos antecedentes, Gromov fue el responsable de la Operación «Magistral» (19/11/87 al 10/01/88) que liberó a la ciudad sitiada de Khost (situada en el este de Afganistán en la frontera con Pakistán) del cerco rebelde y limpió la carretera entre Khost y Gardez. El éxito de esta operación le valió el título de Héroe de la Unión Soviética.
Teniente General Gromov anunciando oficialmente la retirada soviética de Afganistán (01/05/88, Kabul):
La retirada
Los soviéticos jamás tuvieron la intención de quedarse perpétuamente en el país, además de las negociaciones en el pasado y antes de los acuerdos de Ginebra, ya tenían en mente la retirada. En 1987 limitaron las operaciones contra los muyahidines a fin de reducir las bajas soviéticas, limitándose a repeler los ataques o apoyar a las fuerzas gubernamentales. Aún así, se lanzó una gran ofensiva durante mayo y junio a lo largo del río Arghandab y en Paktia hacia Jadji. Y entre noviembre de 1987 a enero de 1988, se llevó a cabo la citada exitosa Operación Magistral. Pero la prioridad era preparar una retirada con éxito.
Para asegurar el paso de los convoyes de forma segura por algunas rutas, los mandos soviéticos en Afganistán negociaron ceses en las hostilidades con varios jefes «muyahidines» locales, pagándoles para que no les atacaran. En esas negociaciones había generalmente dinero y armas, nada era gratis. Una de las principales preocupaciones era el líder de la guerrilla Ahmed Shah Massoud, quien mandaba una gran fuerza de muyahidines en el Valle de Panjshir, que daba al flanco oriental de la ruta entre Bagram y Jabul Ussaraj, por lo que podían ser fácilmente atacados por los muyahidines. Pero los soviéticos ya habían tratado con él anteriormente. En 1983, negociaron un alto el fuego con Massoud para permitir que ambas partes tuvieran tiempo para reconstituir y consolidar sus fuerzas. En abril de 1984, después de que expirara el acuerdo de alto el fuego, los soviéticos reanudaron su ofensiva en el Panjshir. Ahora, los soviéticos entraron otra vez en negociaciones directas con Massoud para el paso seguro de las fuerzas soviéticas. El acuerdo fue firmado y el dinero entregado. También la fuerza aérea soviética dejó de hostigar en la zona, así que los hombres de Massoud ya no tenían que esconderse.
Esquema de la retirada, con detalle de las 2 fases:
Primera fase (15 de mayo de 1988 – 15 de agosto de 1988).
En el mes de abril y principios de mayo de 1988, antes de la fecha señalada de comienzo, el 15 de mayo, se desalojaron los pequeños puestos en Asadabad, Gul’bakhar, Bamian, Baraki, Chagcharan y Shadzhoy. El personal no abandonó el país, sino que fue incorporado a los regimientos y brigadas de los que dependían.
Originariamente, se planeaba evacuar en la primera fase a todas las unidades de la zona oeste del país. Pero el presidente Najibullah no se sentía capaz de poder asumir todavía la responsabilidad en la zona, por lo que solicitó que se mantuvieran las tropas soviéticas en Shindand y en Herat, postponiendo su retirada para la segunda fase. Como la URSS tenía que cumplir el calendario acordado y haber replegado al 50% de las tropas en la primera fase, en su lugar se evacuó el acuartelamiento soviético en Kunduz (al este del país).
El primer acuartelamiento importante que los soviéticos entregaron en su retirada al ejército gubernamental afgano fue el de Jalalabad. Concretamente fue la 66ª Brigada Independiente de Infantería Motorizada la que se retiró. Para asegurar el repliegue de más de 3000 soldados de la 66ª Brigada, participaron entre 10000 y 12000 tropas soviéticas y afganas en el trayecto desde Jalalab hasta Kabul. Y se emplearon unos 100000 militares entre soviéticos y afganos, para asegurar el paso del resto de la Brigada desde Kabul hasta Khariton. Los ataques rebeldes fueron débiles, los muyahidines estaban más bien a la espera de que se retiraran los soviéticos y atacar a las tropas del gobierno afgano.
Según se iban retirando los soviéticos, iban entregando sus acuartelamientos a las autoridades militares afganas. Además, les dejaban almacenadas, reservas para varios meses de munición, combustible y víveres, así como equipamiento y por supuesto armamento y vehículos. El caso del trasvase de entre la 66ª Brigada y el Ejército afgano fue un desastre. En cuanto se marcharon los soviéticos, las instalaciones fueron saqueadas: municiones, víveres, enseres y mobiliario… hasta llegaron a arrancar puertas y ventanas. El jefe del 1º Cuerpo del Ejército Afgano firmó el trasvase, pero días después pidió suministros de forma urgente a Najibullah, alegando que los soviéticos no habían dejado nada. Tras esta desagradable experiencia, para el futuro, los soviéticos exigirían que la firma de los documentos del trasvase de las instalaciones y de los suministros la hiciera un oficial del Ministerio de Defensa afgano y que toda la operación de la transferencia, comprobación y aceptación fuera grabada con videocámara. En total, los soviéticos entregaron a los afganos 184 cuarteles (valorados en 699 millones de rublos) y 98,3 millones de rublos en equipamiento.
Un BTR-60PB afgano pasa junto a una columna de BTR-80 soviéticos, 1988.
Foto: Mikhail Evstafiev.
El gobierno afgano cada vez notaba más la presión de los guerrilleros, que esperaban a que se retirasen las tropas soviéticas de la zona, para entablar rápidamente combates con el debilitado ejército gubernamental. Había claras señales de que el gobierno de Najibullah no aguantaría mucho tiempo solo, aunque la falta de iniciativa y divisiones entre los grupos de los muyahidines tampoco auguraba una victoria total inminente. La resistencia anunciaba ofensivas generales que nunca llegaban a producirse.
En los enlaces de las noticias que he puesto, se habla de la caida de la ciudad de Kunduz en manos rebeldes. Era la primera capital de provinicia que era tomada por los muyahidines. El General Gromov niega toda posibilidad de que los soviéticos regresaran para reconquistar la ciudad. La ocupación de Kunduz duró 2 días, las tropas gubernamentales consiguieron expulsar a los muyahidines con apoyo aéreo soviético. Pero esos 2 días, fueron 2 días de terror para sus habitantes, víctimas de saqueos, violaciones y ejecuciones. Era una clara señal de lo que les vendría encima a la población afgana en cuanto se fueran los soviéticos y la invasión se convirtiera en guerra civil, en especial, para la gente que vivía en las ciudades, que sufriría previamente asedios y bombardeos por los rebeldes.
Los inspectores de la ONU verificaron que en esta primera fase, en la fecha marcada de 15 de agosto de 1988, se habían retirado el 50% de las tropas soviéticas, exactamente 50183 soldados, evacuando 10 puestos importantes.
Un par de vídeos muy cortos de un noticiario checo en los días 15 y 18 de mayo de 1988, con imágenes de tropas soviéticas regresando a través del «Puente de la Amistad»:
La segunda fase (15 de noviembre de 1988 – 15 de febrero de 1989).
En la segunda fase final de la retirada, las 50100 tropas soviéticas restantes estaban concentradas en 6 provincias (Kabul, Herat, Parwan, Samangan, Balkh y Baghlan), manteniendo 8 importantes puestos hasta su salida definitiva. La nieve comenzaría en noviembre y no era buena idea realizar el repliegue a toda prisa por los peligrosos caminos montañosos del Hindu Kush durante los meses del invierno. Pero estaban atados al calendario de ejecución. Por otra parte los guerrilleros seguían operando libremente y sin restricciones desde Pakistán y no había aparente disminución en el tráfico de armas y municiones para la guerrilla. Moscú envío mensajes de advertencia a Islamabad (capital de Pakistán) haciendo alusión a la posibilidad de aplazar o derogar el tratado.
Los muyahidines habían intentado sin éxito tomar las ciudades importantes de Jalalabad, Kunduz y Faizabad tras la retirada de sus guarniciones soviéticas, poniendo nervioso al gobierno de Najibullah. Querían más garantías sobre su supervivencia. Najibullah pidió que 20000 voluntarios soviéticos permanecieran detrás para asegurar el aeródromo de Kabul y la carretera entre Kabul y Khariton.
Ese mes de noviembre, se estableció un puente aéreo a Kabul y a Kandahar. Diariamente, entre 15 y 20 aviones de carga Il-76 soviéticos llevaban toneladas de harina, armas, municion y equipo para sustentar a su aliado afgano. La URSS no quería abandonar Afganistán, dejándo al régimen comunista afgano sin posibilidades de subsistir o negociar con los rebeldes. Con el aumento de la presión de la amenaza rebelde, los soviéticos se vieron obligados a paralizar la retirada en varias ocasiones. El Ministro de Asuntos Exteriores soviético, Eduard Scheverdnadze, se reunió con Najibullah. Poco después, la retirada se detenía. El Primer Viceministro de Asuntos Exteriores soviético, Alexander Bessmertnij, anunciaba el 4 de noviembre de 1988, que la retirada soviética de Afganistán quedaba suspendida.
Las tropas soviéticas no se replegarían ni en noviembre ni en diciembre. En lugar de ello, los gobiernos soviético y afgano discutieron varios planes para estabilizar Afganistán. Estos incluían mantener la ruta abierta entre Khariton y Kabul (para poder abastecer al régimen por tierra desde la URSS) con una división soviética destacada en el país (11000 hombres) o con fuerzas de las Naciones Unidas que sustituyeran a las replegadas soviéticas; completar la retirada de las fuerzas soviéticas, pero luego reintroducir regimientos soviéticos para escoltar los convoyes y mantener un suministro constante de material humanitario a Afganistán; o no completar la retirada, pero se quedarían voluntarios soviéticos para proteger la citada ruta, que se les pagaría entre 800 y 1000 rublos mensuales. Aunque no se trató, el gobierno afgano pensó en contratar milicias afganas para proteger la ruta. Ésto último se llevó a la práctica posteriormente, cuando se quedó en soledad el gobierno afgano. No quedaba otra opción, las levas obligatorias no cubrían las necesidades, las deserciones y falta de moral mermaban continuamente al ejército. La «lealtad» solo se podía tener temporalmente, a base de dinero, armas y alimentos. Mientras pudo pagar, pudo tener fuerzas que le protegieran.
El gobierno soviético decidió respetar el calendario a pesar de la aparente falta de cumplimiento por parte de Pakistán y de Estados Unidos, que seguían armando y entrenando a la guerrilla. La segunda fase de la retirada comenzó el 2 de enero de 1989, en pleno invierno. Más de 30000 soldados en el corredor del Este tendrían que viajar a través del túnel de Salang, a una altura de 4300 metros sobre el nivel del mar, con hielo, nieve, niebla, carreteras estrechas y condiciones de conducción complicadas.
Cuando Najibullah se enteró del acuerdo de tránsito seguro que tenían los militares sovíeticos con el líder guerrillero Massoud, protestó ante el gobierno soviético. Najibullah, no tenía ningún acuerdo de alto el fuego con los guerrilleros afganos, y Massoud era uno de los más importantes enemigos que tenía el régimen.
Los mandos militares soviéticos estaban en contra de romper el acuerdo, pero el Ministro de Defensa, General Yazov, le ordena a Gromov que ataque las posiciones de los hombres de Massoud en el Valle del Panshir, ahora que estaban desprevenidos. La operación «Tifón» se desarrolla entre el 23 y el 26 de enero de 1989. El General Gromov objetó pero tuvo que llevar a cabo la operación. Fue la última operación militar soviética a gran escala, abarcando las operaciones militares las provincias de Parwan, Baghlan y Kunduz, con el objetivo de «aplicar el mayor daño posible a las fuerzas de la oposición en las provincias del centro y norte del país».
Durante esos 4 días, para minimizar las pérdidas soviéticas, se abstuvieron de realizar combates que implicaran contacto directo con el enemigo, empleando masivamente bombardeos aéreos (más de 1000 salidas de combate) y artillería de largo alcance (más de 400 misiones), incluyendo misiles tierra-tierra tácticos «Scud» (entre noviembre y enero, los soviéticos lanzaron 92 «Scud» para apoyar la retirada). Durante la operación hubo pocas bajas soviéticas. Las pérdidas de la oposición no se pueden determinar con seguridad, según los soviéticos fueron unas 600 bajas entre muertos y heridos. También se informa de la destrucción a los rebeldes, de 32 morteros, 15 lanzacohetes, 46 ametralladoras pesas, 10 depósitos de suministros, 36 puestos fortificados y 15 camiones.
Según el periodista soviético Artyom Borovik, se produjeron gran cantidad de bajas civiles. El principal asesor militar soviético en la República Democrática de Afganistán, el Coronel General Mikhail Sotskova, explicaba que durante los combates, las mujeres afganas fueron a la carretera, y al paso de las ruedas o las cadenas de vehículos blindados soviéticos, arrojaban los cuerpos de sus hijos muertos.
Después de la destrucción, Massoud envió una carta al embajador soviético en Afganistán, Yuli Vorontsov, en la que decía:
«Las acciones crueles y vergonzosas que su gente ha cometido en Salang, en Jabal-us-Saraj y en otras regiones en los últimos días de su estancia en este país, han destruido todo el optimismo que se había manifestado recientemente. Por el contrario, nos hace creer que queréis imponer por cualquier vía a nuestro pueblo musulmán un régimen moribundo. Esto es imposible e ilógico.»
A pesar de la violación del alto el fuego, Massoud no atacó a los soviéticos.
El 4 de febrero de 1989, abandona la última unidad soviética la capital afgana, Kabul. Entre el 30 de enero y el 3 de febrero, todos las aeronaves soviéticas y los elementos de apoyo en tierra abandonan la base aérea de Bagram. En el Este, el 8 de febrero el 40º Ejército ya ha pasado el tunel de Salang, y para el día 10 ya han llegado a la frontera donde esperan para cruzar a la URSS. En el Oeste, el 4 de febrero, las tropas abandonan Shindand y el 8 de febrero, Herat. Entre el 11 y el 14 de febrero, cruzan las tropas la frontera y entran en territorio soviético.
El 15 de febrero, tiene lugar el acto oficial de la retirada, con la presencia de gran cantidad de medios de comunicación y muchos familiares que buscaban desesperadamente a sus seres queridos. Esa mañana, hace su aparición una columna con los últimos efectivos, con el General Gromov. Algunas fotografías de ese día especial:
Un padre busca a su hijo, preguntando al personal que se encuentra formado. Por razones evidentes, mucha gente no podía esperar más y se saltaban el protocolo.
Estas capturas de vídeo pertenecen a una escena emotiva del reencuentro entre un hijo y sus padres:
La UNGOMAP recibió numerosas quejas de Afganistán y Paquistán, de haber violado los acuerdos de Ginebra. Afganitán alegaba actividades políticas y propaganda hostil procedente de su vecino Pakistán, cruce de disparos en la frontera, infiltración de hombres y material por la frontera, actos de sabotaje, ataques con cohetes a centros urbanos, violaciones del espacio aéreo afgano y la presencia de los paquistaníes en los campos de entrenamiento y depósitos de armas de los rebeldes, así como restricciones a refugiados afganos que querían regresar al país. Pakistán se quejaba también de actividades políticas y propaganda hostil por parte de Afganistán, bombardeos y violación del espacio aéreo por aviones afganos, actos de sabotaje, cruce de disparos, incluyendo el uso de misiles «Scud» contra el territorio paquistaní.
UNGOMAP intentó investigar las denuncias de ambas partes, pero la difícil geografía del terreno, el tiempo transcurrido desde que se producía el incidente y era informado o la preocupación por las condiciones de seguridad que prevalecen en la zona de operaciones, dificultaron estas investigaciones. De los 5 millones de refugiados que habían abandonado el país, debido a que la lucha continuaba independientemente de la retirada soviética, las condiciones de vida eran muy peligrosas y nada recomendables, así que solo un número limitado regresó a Afganistán. El mandato de la UNGOMAP finalizó formalmente el 15 de marzo de 1990.
Canadiense miembro de la misión UNGOMAP, supervisando la retirada de unidades soviéticas (1988):
La retirada fue un éxito gracias al esfuerzo diplomático, económico y los planes militares que permitieron ejecutar el repliegue de forma ordenada, cumpliendo los plazos marcados y dejando atrás a un gobierno con posibilidades de sobrevivir (curiosamente el gobierno comunista de Najibullah duró hasta abril de 1992, mientras que su aliado y benefactor, la URSS, desparecía en diciembre de 1991). Aunque no fue exenta de peligro, muriendo en los 10 meses de la ejecución de la retirada, 523 soviéticos en los 10 meses de duración de la ejecución de la retirada. No hay datos fiables por la otra parte, pero se calcula que los muyahidines perderían unos 1200 hombres. El último soldado soviético que murió en Afganistán fue el soldado del VDV, Igor Lyakhovich en Salang, el 7 de febrero de 1989, con 20 años.
Cuando cruzó la frontera el Teniente General Gromov el 15 de febrero de 1989, dijo: «Detrás de mí no queda ni un soldado soviético». Esta afirmación es incorrecta, detrás quedaban los Guardias de Fronteras dependientes de la KGB, que cubrieron la retirada de las tropas y sólo pudieron regresar al territorio de la Unión Soviética en la tarde de ese 15 de febrero. Unidades independientes de Guardias de Fronteras en territorios de Afganistán para proteger la frontera soviético-afgana hasta abril de 1989. También quedaron atrás los desaparecidos (según varias fuentes, unos dicen que 265 y otros 417) y desertores, así como personal asesor y de la embajada soviética, que finalmente tendría que ser evacuado en 1992, cuando los guerrilleros afganos entraron en Kabul.
Imagen del 28 de agosto de 1992, durante la operación de evacuación del personal ruso de la embajada en Kabul. Uno de los 3 aviones Ilyushin Il-76 es alcanzado por los guerrilleros afganos que se encuentran en plena guerra civil:
Atrás quedaron para siempre las vidas de afganos y soviéticos…
Según una fuente 14453 y según otra 15051 soviéticos muertos, 53753 heridos, como dije antes, según una fuente 265 desparecidos y según otra 417. También hubo personal civil soviético en Afganistán, calculándose unos 100 muertos. De las fuerzas armadas afganas gubernamentales, unos 18000 miembros muertos. Por parte de los «muyahidines», algo poco probable de saber con seguridad, más de 200000. Y la peor parte, los civiles afganos entre 670000 hasta 2 millones de personas, dependiendo de las fuentes, y unos 3 millones de heridos entre civiles y militares. Unos 5 millones de afganos huyeron del país y otros 2 millones de desplazados dentro del país.
Recomiendo la lectura de este documento, contiene información interesante y detallada, alguna extraída aquí: Grau, Lester. «Breaking contact without leaving chaos: the Soviet withdrawal from Afghanistan». Foreign Military Studies Office Publications. 17 August 2007.